Temoaya - Casa de las Mujeres Y'apanigui - Centro de Artes, Oficios y Salud
Actualmente se trabaja en el Municipio de Temoaya, en el Estado de México. El estado se conforma con un total de 125 municipios, la zona de Temoaya se integra por 37 comunidades, de las cuales 19 están habitadas por población indígena, de la étnia Otomí En este municipio se encuentra el Centro Ceremonial Otomí donde los Otomíes llevan a cabo celebraciones y eventos, es una zona antigua que se remonta a la etapa prehispánica, lo cual le imprime una identidad cultural particular en la cual resaltan los saberes ancestrales. Su extensión es de a 199.63 km2. (INEGI, 2008)
En las comunidades habitadas por la población Otomí, prevalece la organización comunitaria que se integra por cargos cívicos y religiosos: como la mayordomía, comisarios ejidales, delegados comunitarios y regidores, así como en el Ayuntamiento prevalece la Presidencia Municipal y otros cargos. Desde hace 78 años, se en Temoaya han prevalecido las dirigencias masculinas, sin embargo, desde que las mujeres participan en las organizaciones sociales, cooperativas, grupos de base y colectivos empiezan a surgir liderazgos femenimos. Por otro lado, hay organizaciones sociales que son instrumentos de intermediación entre las bases y el gobierno estatal y federal (la Central Nacional Campesina, CNC, la Unión General de Organizaciones Campesinas del Estado de México, UGOCEM) etc., estas siguen teniendo gran influencia en el Municipio principalmente rtesurgen con fuerza en tiempos electorales cuando diferentes partidos hacen uso corporativo de estas..
Temoaya se caracteriza por la concentración de la riqueza y las relaciones de poder en pocas manos ejercidas, principalmente por población mestiza de clase media alta. Este municipio cuenta con una población indígena de 24,416 habitantes que representa el 38.79% de la población total. Los integrantes de la etnia Otomí, principalmente la población adulta son bilingües y hablan la lengua otomí (ñha ñhu). En particular la población femenina fortalece su identidad cultural al utilizar su ideoma y su vestimenta prehispánica, ejerciendo su derecho a la diversidad a pesar de la discriminación y la tendencia a incorporarles a una identidad globalizadora.
La pobreza es un problema social que abarca a un sector mayoritario de la población, mujeres y hombres, niñas y niños que viven en situación de marginación y carencia, según datos de oficiales (SEDESOL 2008), el ingreso mensual del 89% de las familias indígenas constituidas por entre 5 a 7 miembros es de 1 a 2 salarios mínimos, mientras el 11% restante tiene un ingreso mensual mayor a 4 salarios mínimos.
Desde hace más de tres decenios surge el problema de desempleo ante el deterioro y falta de incentivos al sector agrícola, por lo cual Temoaya se convierte en una zona que expulsa la mano de obra masculina que migra en busca de empleo. Las mujeres de las comunidades más empobrecidas se ven obligadas a fungir como cabezas de familia, asumen nuevas responsabilidades y cargas de trabajo adicionales, el fenómeno migratorio se ha convertido en una escuela organizativa para las mujeres y por ende ha promovido el surgimiento de nuevas identidades a nivel local.
En Temoaya un número cada vez más considerable de mujeres otomíes empiezan a participar de manera entusiasta y se involucran comprometidamente tanto en sus propias organizaciones, como en las iniciativas que emprende SIEMBRA, este crecimiento espontaneo fue cada vez mayor, por lo que ellas se dieron a la tarea de buscar un espacio comun donde reunirse. Con gran receptividad y de manera generosa una de las mujeres, Felícitas Gómez, visionaria dirigenta y propietaria de un inmueble, decidió ofrecerlo en comodato, con alegria las mujeres y SIEMBRA aceptaron su oferta, ya que es una casa y terreno amplio que actualmente sirve como espacio de utilidad pública, ahi se celebran las reuniones y procesos de aprendizaje. SIEMBRA firmó el contrato de comodato, en co-gestion con las mujeres se tramió un donativo para terminar la casa y con el apoyo de un valioso voluntario, Gerardo García, se llevó a cabo los trabajos de instalación electrica e hidráulica, en el año 2003, las mujeres participantes hicieron realidad su sueño y han denominado a este espacio La Casa de las Mujeres Ya'Panigui.
La anterior iniciativa y el continuo crecimiento de la red de organizaciones, colectivos, grupos de base y cooperativas, induce a las mujeres y a SIEMBRA a iniciar un proceso de co-gestión con diversas agencias financieras para buscar un espacio más amplio, años más tarde. 2009, se consiguen fondos para comprar un terreno e iniciar la construcción del nuevo lugar entre ellas surge la inquietud de ponerle un nombre a este espacio de manera que inicia el debate y ellas lo han denominado Centro de Artes, Oficios y Salud Ya'Panigui, que en lengua otomí quiere decir "nuevo amanecer" con la idea de realizar ahi un trabajo de base que involucre a toda la comunidad en diferentes procesos para fortalecer el tejido social.
SIEMBRA junto con las mujeres emprendedoras se hacen responsables de administrar los recursos donados por una empresa e inician los trabajos; ellas proceden a elegir a un equipo de construcción y un equipo de gestión y quedan integrados por tres mujeres cada uno. Conjuntamente SIEMBRA y ellas contratan los servicios de la organización TELAR Laboratoria de Arquitectura, para que en base a las necesidades e intereses de ellas se elabore el proyecto arquitectónico. Tres meses más tarde, TELAR les presenta la maqueta y los planos, ellas lo aprueban y se contrata a un equipo de maestros y albañiles de la propia localidad para generar empleo, quienes bajo la coordinación del arquitecto residente emprenden los trabajos de construcción,
Se inicia la obra de construcción a mediados del año 2010 y hemos continuado el proceso de construcción al 75% en el 2011, por lo que estamos buscando donantes y agencias de financiamiento para continuar construyendo el 25% restante para finalizar el centro y que al fin las mujeres organizadas vean realizado el sueño acariciado: un espacio propio y específico para que las mujeres de la comunidad puedan platicar sus asuntos, conocer a otras mujeres, aprender experiencias, emprender actividades y proyectos, asistir a talleres y sentirse valoradas e invitar a otros integrantes de la comunidad, hombres y mujeres de diversos grupos de edad .
En las comunidades habitadas por la población Otomí, prevalece la organización comunitaria que se integra por cargos cívicos y religiosos: como la mayordomía, comisarios ejidales, delegados comunitarios y regidores, así como en el Ayuntamiento prevalece la Presidencia Municipal y otros cargos. Desde hace 78 años, se en Temoaya han prevalecido las dirigencias masculinas, sin embargo, desde que las mujeres participan en las organizaciones sociales, cooperativas, grupos de base y colectivos empiezan a surgir liderazgos femenimos. Por otro lado, hay organizaciones sociales que son instrumentos de intermediación entre las bases y el gobierno estatal y federal (la Central Nacional Campesina, CNC, la Unión General de Organizaciones Campesinas del Estado de México, UGOCEM) etc., estas siguen teniendo gran influencia en el Municipio principalmente rtesurgen con fuerza en tiempos electorales cuando diferentes partidos hacen uso corporativo de estas..
Temoaya se caracteriza por la concentración de la riqueza y las relaciones de poder en pocas manos ejercidas, principalmente por población mestiza de clase media alta. Este municipio cuenta con una población indígena de 24,416 habitantes que representa el 38.79% de la población total. Los integrantes de la etnia Otomí, principalmente la población adulta son bilingües y hablan la lengua otomí (ñha ñhu). En particular la población femenina fortalece su identidad cultural al utilizar su ideoma y su vestimenta prehispánica, ejerciendo su derecho a la diversidad a pesar de la discriminación y la tendencia a incorporarles a una identidad globalizadora.
La pobreza es un problema social que abarca a un sector mayoritario de la población, mujeres y hombres, niñas y niños que viven en situación de marginación y carencia, según datos de oficiales (SEDESOL 2008), el ingreso mensual del 89% de las familias indígenas constituidas por entre 5 a 7 miembros es de 1 a 2 salarios mínimos, mientras el 11% restante tiene un ingreso mensual mayor a 4 salarios mínimos.
Desde hace más de tres decenios surge el problema de desempleo ante el deterioro y falta de incentivos al sector agrícola, por lo cual Temoaya se convierte en una zona que expulsa la mano de obra masculina que migra en busca de empleo. Las mujeres de las comunidades más empobrecidas se ven obligadas a fungir como cabezas de familia, asumen nuevas responsabilidades y cargas de trabajo adicionales, el fenómeno migratorio se ha convertido en una escuela organizativa para las mujeres y por ende ha promovido el surgimiento de nuevas identidades a nivel local.
En Temoaya un número cada vez más considerable de mujeres otomíes empiezan a participar de manera entusiasta y se involucran comprometidamente tanto en sus propias organizaciones, como en las iniciativas que emprende SIEMBRA, este crecimiento espontaneo fue cada vez mayor, por lo que ellas se dieron a la tarea de buscar un espacio comun donde reunirse. Con gran receptividad y de manera generosa una de las mujeres, Felícitas Gómez, visionaria dirigenta y propietaria de un inmueble, decidió ofrecerlo en comodato, con alegria las mujeres y SIEMBRA aceptaron su oferta, ya que es una casa y terreno amplio que actualmente sirve como espacio de utilidad pública, ahi se celebran las reuniones y procesos de aprendizaje. SIEMBRA firmó el contrato de comodato, en co-gestion con las mujeres se tramió un donativo para terminar la casa y con el apoyo de un valioso voluntario, Gerardo García, se llevó a cabo los trabajos de instalación electrica e hidráulica, en el año 2003, las mujeres participantes hicieron realidad su sueño y han denominado a este espacio La Casa de las Mujeres Ya'Panigui.
La anterior iniciativa y el continuo crecimiento de la red de organizaciones, colectivos, grupos de base y cooperativas, induce a las mujeres y a SIEMBRA a iniciar un proceso de co-gestión con diversas agencias financieras para buscar un espacio más amplio, años más tarde. 2009, se consiguen fondos para comprar un terreno e iniciar la construcción del nuevo lugar entre ellas surge la inquietud de ponerle un nombre a este espacio de manera que inicia el debate y ellas lo han denominado Centro de Artes, Oficios y Salud Ya'Panigui, que en lengua otomí quiere decir "nuevo amanecer" con la idea de realizar ahi un trabajo de base que involucre a toda la comunidad en diferentes procesos para fortalecer el tejido social.
SIEMBRA junto con las mujeres emprendedoras se hacen responsables de administrar los recursos donados por una empresa e inician los trabajos; ellas proceden a elegir a un equipo de construcción y un equipo de gestión y quedan integrados por tres mujeres cada uno. Conjuntamente SIEMBRA y ellas contratan los servicios de la organización TELAR Laboratoria de Arquitectura, para que en base a las necesidades e intereses de ellas se elabore el proyecto arquitectónico. Tres meses más tarde, TELAR les presenta la maqueta y los planos, ellas lo aprueban y se contrata a un equipo de maestros y albañiles de la propia localidad para generar empleo, quienes bajo la coordinación del arquitecto residente emprenden los trabajos de construcción,
Se inicia la obra de construcción a mediados del año 2010 y hemos continuado el proceso de construcción al 75% en el 2011, por lo que estamos buscando donantes y agencias de financiamiento para continuar construyendo el 25% restante para finalizar el centro y que al fin las mujeres organizadas vean realizado el sueño acariciado: un espacio propio y específico para que las mujeres de la comunidad puedan platicar sus asuntos, conocer a otras mujeres, aprender experiencias, emprender actividades y proyectos, asistir a talleres y sentirse valoradas e invitar a otros integrantes de la comunidad, hombres y mujeres de diversos grupos de edad .
Nos enorgullece haber acompañado y vinculado a los grupos de mujeres de Temoaya que integran cooperativas, grupos de ahorro, colectivos y grupos de base como la organización “Casa de las Mujeres” con diversas organizaciones sociales tales como: Tequio y ADIVAC quienes realizaron procesos creativos con las mujeres y por primera en la comunidad las mujeres llevan a cabo un evento cultural donde veinte mujeres de la localidad presentan dos obras de teatro en la plaza central del zócalo de San Pedro Arriba, rompiendo con usos y costumbre ellas se atreven y son capaces de hacerlo con seguridad y confianza ante el numeroso público local que se congregó en la plaza pública del zocalo local; así como el Centro de Apoyo a la Mujer para una vida libre de violencia, quienes fueron muy aplaudidas, tuvieron exito, al final de ambos espectáculos se generó un debate con el público presente quien se mostró interesado e hizo muchas preguntas.
Vínculos
Las mujeres han construido y consolidado nuevos espacios colectivos que democratizan la forma en que se toman las decisiones, la mayoría de la ciudadanía decide y manda, esta nueva actitud local permite que las cooperativas, colectivos, grupos de ahorro y organizaciones de base se encuentren involucradas unas con otras. Esta interacción local permite que las ciudadanas se integren y trabajen en red en torno a la La Casa de las Mujeres, al establecer lazos de interdependencia con muchas otras organizaciones de mujeres rurales indígenas, logran concertar diferencias en la forma de pensar y hacer las cosas.
Las ciudadanas participan y elaboran una agenda común que las identifica y mantiene coordinadas, esta agenda integra propuesas conjuntas y marca también estrategias para emprender acciones planificadas y lograr los objetivos previstos, los cuales surgen a partir de problemáticas particulares de su realidad y su entorno. El Programa de SIEMBRA procura incorporar un proceso que le permite establecer vínculos y fortalecer a las ciudadanas, así como a la institución, por lo que las integrantes de los grupos, cooperativas y colectivos actúan con mayor representatividad, seguridad y libertad en la arena política, porque sus compañeras y compañeros les otorgan ese mandato. En el caso de las ciudadanas y dirigentas más activas y reconocidas, son acreedoras a niveles de reconocimiento no sólo dentro de sus familias, sino también en sus grupos de ahorro, organizaciones, cooperativas o proyectos productivos, algunas de ellas han desarrollado amplias posibilidades de proyección local hacia los espacios políticos de encuentro más amplio. Hoy en día, se cobijan en torno a la Casa de las Mujeres Y'apanigui estrechos lazos que las fortalece como ciudadanas organizadas y a nosotros, como institucion, pues dejamos de estar aislados e interactuamos en una red para trabajar y copartir conocimientos y experiencias con diferentes actores sociales, como sigue::
- Escuela Nacional de Formación de Dirigentes Rurales e Indígenas Comaletzin, A.C.
- Hombres por la Equidad de Género, A.C.
- Espacio de Mujeres por una Vida Digna y Sin Violencia, A. C.
- Católicas por el Derecho a Decidir, A. C.
- Grupo Reto
- Centro Regional de Encuentro Comunitario y Enseñanza Social Municipal
- El Ayuntamiento, autoridad municipal y cabildo
- Embajadoras/es que representan a las Embajadas de Finlandia, Australia, Nueva Zelanda y Canadá
- Red Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas
- Red Nacional de Asesores y Consultoras de mujeres rurales e indígenas
- Red Nacional de Género y Desarrollo
.-Red Nacional de Desarrollo Sostenible
- Red Latinoamericana de Mujeres para el Desarrollo
- Red Latinoamericana de Mujeres Rurales e Indígenas
- Red Latinoamericana de Mujeres Trabajo y Economía
- Red Nacional de Mercadeo y Comercio Justo Yamutzi-Brehña
- Red Latinoamericana en Gestión de Organizaciones
Las ciudadanas participan y elaboran una agenda común que las identifica y mantiene coordinadas, esta agenda integra propuesas conjuntas y marca también estrategias para emprender acciones planificadas y lograr los objetivos previstos, los cuales surgen a partir de problemáticas particulares de su realidad y su entorno. El Programa de SIEMBRA procura incorporar un proceso que le permite establecer vínculos y fortalecer a las ciudadanas, así como a la institución, por lo que las integrantes de los grupos, cooperativas y colectivos actúan con mayor representatividad, seguridad y libertad en la arena política, porque sus compañeras y compañeros les otorgan ese mandato. En el caso de las ciudadanas y dirigentas más activas y reconocidas, son acreedoras a niveles de reconocimiento no sólo dentro de sus familias, sino también en sus grupos de ahorro, organizaciones, cooperativas o proyectos productivos, algunas de ellas han desarrollado amplias posibilidades de proyección local hacia los espacios políticos de encuentro más amplio. Hoy en día, se cobijan en torno a la Casa de las Mujeres Y'apanigui estrechos lazos que las fortalece como ciudadanas organizadas y a nosotros, como institucion, pues dejamos de estar aislados e interactuamos en una red para trabajar y copartir conocimientos y experiencias con diferentes actores sociales, como sigue::
- Escuela Nacional de Formación de Dirigentes Rurales e Indígenas Comaletzin, A.C.
- Hombres por la Equidad de Género, A.C.
- Espacio de Mujeres por una Vida Digna y Sin Violencia, A. C.
- Católicas por el Derecho a Decidir, A. C.
- Grupo Reto
- Centro Regional de Encuentro Comunitario y Enseñanza Social Municipal
- El Ayuntamiento, autoridad municipal y cabildo
- Embajadoras/es que representan a las Embajadas de Finlandia, Australia, Nueva Zelanda y Canadá
- Red Nacional de Mujeres Rurales e Indígenas
- Red Nacional de Asesores y Consultoras de mujeres rurales e indígenas
- Red Nacional de Género y Desarrollo
.-Red Nacional de Desarrollo Sostenible
- Red Latinoamericana de Mujeres para el Desarrollo
- Red Latinoamericana de Mujeres Rurales e Indígenas
- Red Latinoamericana de Mujeres Trabajo y Economía
- Red Nacional de Mercadeo y Comercio Justo Yamutzi-Brehña
- Red Latinoamericana en Gestión de Organizaciones